Samuel es un niño de 3 años y medios, que fue diagnosticado a los 23 meses con autismo de leve a moderado, y que se ha recuperado muchísimo gracias a el tratamiento que se le ha aplicado. Este blog ha sido creado para seguir de cerca su tratamiento y ayudar a muchos padres que estén en esta situación y que aun creen que el autismo no es recuperable.

miércoles, 18 de junio de 2008

La dieta como terapia nutricional

La terapia nutricional sin gluten y sin caseína se basa en varios estudios realizados por médicos y científicos . Estos estudios han encontrado la existencia de niveles elevados de péptidos de las proteínas de la caseína y el gluten, en muchas personas con autismo.

Para la mayoría de las personas, la digestión de las proteínas (proceso que las convierte en partículas mas pequeñas llamadas péptidos, y posteriormente en aminoácidos) es un proceso normal. Sin embargo, se ha encontrado que muchas personas con autismo tienen dificultad en digerir adecuadamente algunas proteínas, permitiendo que entren en la sangre en forma de péptidos. La razón de esta mala digestión suele ser una falta de enzimas que ayudan a la digestión, y una permeabilidad exagerada del intestino es lo que facilita que penetren en el torrente sanguíneo.

El gluten se encuentra en el trigo, centeno, cebada, avena, espelta y malta, y la caseína en la leche de vaca, oveja, cabra y derivados de éstos como yogurt, mantequilla, helado, queso...
En el caso de proteínas como el gluten y la caseína, algunos de los compuestos que entran en el torrente sanguíneo y cruzan la barrera hemato-cefálica tienen propiedades opiodes. Estos péptidos reaccionan con los receptores opioides del cerebro causando efectos similares a los que provocan las drogas opiaceas como la heroína y la morfina. Los péptidos procedentes del gluten se llaman gliadinomorfina y los de la caseína casomorfina.

Se ha observado que estos componentes reaccionan en ciertas áreas del cerebro tales como los lóbulos temporales que participan en los procesos de integración del lenguaje y la audición. La eliminación del gluten y la caseína de la dieta de muchos niños y adultos autistas ha dado resultados muy positivos. Incluso, en algunos casos, se ha logrado la normalización completa del niño al combinar terapias nutricionales con terapias educacionales efectivas.

Es recomendable antes de iniciar esta dieta, realizar un análisis de orina que permita determinar si existe o no un exceso de péptidos. En caso que se decidiera realizar la dieta, los expertos recomiendan eliminar primero la caseína y después de unas seis semanas retirar los alimentos con gluten. Es fundamental saber que si se eliminan los productos lácteos habrá que asegurarse que el niño ingiera la cantidad necesaria de calcio para evitar carencias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario